Quoc Dinh Guesthouse

El autobús nos dejó justo delante del alojamiento, así que no podíamos entrar con mejor pie al hotel. El Quoc Dinh Guesthouse se encuentra en una de las carreteras principales de Mui Ne, donde es fácil encontrar restaurantes y tiendas de todo tipo. Los dos días que pasamos en el Quoc Dinh dormimos en una habitación doble con baño privado. La cama era muy cómoda pero echamos de menos una sábana más grande, ya que la que había no acababa de taparnos a los dos, aunque tampoco necesitamos más. Justo delante teníamos la televisión, una pequeña nevera con aguas de bienvenida y una silla. También encontramos un armario, lo suficientemente grande para guardar el equipaje, y al lado de la cama teníamos una mesita de noche. Además de aire acondicionado, había ventilador y una ventana que daba al pasillo. El baño era amplio, y al igual que el resto, todo estaba impecable. Como en muchos otros hoteles de Asia, la ducha y el lavabo no están separados, y acabas mojando todo, algo que a nosotros no nos importa, ya que estamos más que acostumbrados. También habían varios amenities que reponían a diario. Con la habitación entra un pequeño desayuno. Este consiste en un plato de fruta variada con café o té. A esto le puedes añadir lo que quieras del menú pagando algo más. Destacar la amabilidad de los dueños que siempre estuvieron atentos y nos ayudaron en todo. En el mismo hotel también reservamos los billetes de autobús a la siguiente ciudad, ya que el precio nos pareció bien, y alquilamos una moto por menos de 5€.