Name: Mar De La Carrasca
Address: 12124 Villahermosa del Río, Castellón, Villahermosa del Río, Villahermosa del Río, Villahermosa del Río, 12124, España
Rating: 8

Alojamiento para no fumadores

Asistencia para reservas

Jardín

Terraza

No está permitido fumar (espacios compartidos ni privados)

General

Secador

Habitaciones

Café/té para los huéspedes

Cocina

Kitchenette

Comidas

Asistencia para tours

Servicios de turismo

Zona para pícnics

Recreación

Aparcamiento gratuito

Aparcamiento

Se admiten mascotas

Mascotas

Ubicación

En el hotel

Aeropuerto de Castellón

Mar De La Carrasca

Villahermosa del Río

Bohemio alternativo muy mal entendido
Acudimos a este lugar buscando belleza y paz, pero ojo con lo que deseas…
Condujimos de noche por una vía forestal intransitable y algo peligrosa, al llegar, no había ni una sola luz y el acceso a la casa fue algo accidentado pero ya estábamos allí !!! Ja
- La calefacción va con la cocina de leña de la casa que por la noche se apaga ( en un lugar con nieve ) si quieres calor extra, tienes que ocuparte tu mismo de tu chimenea ( y ahumar tu ropa )
- Si pides alguna bebida, la oferta es muy limitada y si te decides por una copa de vino  tienes que comprar la botella entera salvo que algún otro cliente haya dejado alguna botella a mitad 😱
- Por último, olvídate de dormir hasta las nueve, a las seis de la mañana la luz te despierta porque no hay ningún tipo de cortina opaca que tape las ventanas o en su defecto, te pueden despertar los otros clientes ya que el aislamiento es nulo y se oye literalmente TODO
- Ah si, se me olvidaba, no existe ni llave ni pestillo en toda la casa, cualquiera puede entrar en tu habitación sin ningún tipo de impedimento
, bueno, cualquiera menos el servicio de habitaciones que no existe…
- Nota extra: no hay ni tele ni wifi ni aparato de música…
Total, que te vas de colonias pero por 220€/noche, dis balance total precio-beneficio

Bohemios o demasiado laxos ?

Estancia de fin de semana en habitación oriental, el balance es positivo, pero hay que tener claro que no es un alojamiento para cualquiera. 
El lugar es espectacular, las vistas desde la habitación son inmejorables, el precio que hay que pagar es la pista de 3 km en un estado regular, nosotros llegamos con un poco de dificultad pero teniendo en cuenta que llegamos de noche y en medio de una tormenta creo que cualquier conductor con un poco de experiencia puede llegar sin problema, y no es necesario ir con un 4x4 (nosotros fuimos con uno que no es alto). Tampoco hay tv, ni wifi, ni señal de teléfono en casi ningún lugar, para nosotros fue una ventaja...
La comida a nosotros nos ha parecido genial, con una filosofía muy especial que puede que no sea del gusto de cualquiera, servida de manera íntima y cercana por los dueños, que te explican los platos. Entiendo que haya quien le moleste que los perros estén allí mientras comes, a nosotros no nos molestaron, y como la casa tiene dos habitaciones todas las comidas las haces con los otros huéspedes, en nuestro caso fue genial porque era otra pareja encantadora pero puedo entender que si no congenias puede no ser tan agradable, porque necesariamente tienes contacto.
El hotel no está adaptado a personas con movilidad reducida, sería imposible acceder al mismo.
Los dueños (Alberto e Isabel y su hijo) están siempre en la casa, puede que haya gente a la que no le guste pero forma parte del encanto del hotel, nos parecieron unas personas muy interesantes y enamoradas de su trabajo. Respetan de manera total tu intimidad y nunca accederán a la zona de habitaciones, solo coincides en la zona común (cocina y salón con chimenea).Como punto de mejora, en plena pandemia creo que deberían cumplirse las normas (no se cumple ninguna), el virus también puede llegar a estos lugares (y más de los que venimos de las ciudades que podemos contagiarles a ellos que viven más aislados)
La habitación grande y limpia, la calefacción es perfecta (y totalmente sostenible como nos explicaron), chimenea propia, el baño grande pero con poca luz y el agua caliente cuesta mucho regularla (o te quemas o sale fría), y encima un día fallo la caldera y sufrimos un poco...
Los alrededores son impresionantes si te gusta la naturaleza, salimos a correr los dos días por los alrededores y son km de bosques sin nadie alrededor, hay rutas de senderismo, cascadas, el pueblo de Villahermosa es agradable (sobre todo el paseo por la zona baja donde está el río). Y aunque ahora no se podía acceder a Aragón por las restricciones, desde el hotel tienes la provincia de Teruel a 5 km
El resumen es positivo, recomendaría este alojamiento pero hay que saber que no está hecho para cualquiera, deberían de explicarlo mejor en la web del hotel: el acceso, el tipo de comida, compartir espacio y comidas con ellos y otros huéspedes... 
Y respecto de la política de precios, dos comentarios, no se sabe el precio del
Vino hasta que llega la factura (y no son baratos) y no nos gusto que yendo con media pensión les pedimos hacer una comida allí y en lugar de aplicar el precio de la pensión completa nos aplicaron el precio de la comida por separado (10€ más caro)


No apto para cualquiera huésped 

El acceso es algo complicado por pista forestal no asfaltada pero para llegar al lugar con encanto es un requisito para adentrarte en plena naturaleza.Estuvimos en la habitación flotante , ideal para desconectar, vistas al valle con un sonido perfecto y naturaleza en estado puro , habitación amplia con cocina equipada y baño completo muy bonito todo y bien decorado . Respecto a la comida no tienes opción de carta pero está todo muy bueno , probamos un cus cus con tempeh exquisito , y el desayuno bastante cumplido . El servicio muy atento y muy agradable en todo . Deseando volver y seguir desconectado de vez en cuando. 

Suite para desconectar 

Hasta ahora no he podido escribir mi opinión porque no sabía cómo funcionaba Trip Advisor

He estado dos veces allí,una recién diagnosticado con un cancer complicado y otras este Junio pasado dos años después casi curado.La primera fui con mi familia y la segunda con mis amigos.

Es un sitio extraordinario con un encanto increíble que se corresponde con el encanto de la familia que lo regenta.

A parte de la restauración de la masía y la decoración que la embellece ,Isabel,Alberto y su hijo Marcus hacen que la experiencia pase a otra dimensión.Son inteligentes,creativos y encantadores

Que nadie espere horarios estrictos y prisas en este establecimiento. Hay que disfrutar y dejar que el tiempo fluya.

No tiene ascensor ni piscina desbordante(ni falta que le hace) pero todo es de un lujo sencillo y discreto pero con los toques de arte de sus dueños y la utilización de la madera que Alberto lleva a otro nivel

La comida que prepara Alberto está buenísima y además puedes estar al lado de él mientras cocina,charlando y riendo.

Puedes hacer excursiones como la de las pozas Del Río Carbón o simplemente pasear sin rumbo fijo

Toda mi familia y mis amigos han quedado encantados con el sitio y con que admitan mascotas,y aseguró que volveremos próximamente 

En cuanto a mi,creo que el lugar ha ayudado en mi proceso de curación ,que aún tengo que cerrar con otra visita.se han convertido en amigos y además transmiten una energía positiva increíble.

Así que aconsejo que visitéis la masía y disfrutéis,sabiendo que es un sitio para estar en el chalet con todos los sentidos,no simplemente de paso,

Un saludo.Os quiere
Antonio Sancho-Tello Grau
Valencia (Spain)



Encanto por arrobas

Un sitio donde desconectar silencio total y transmite mucha paz. He pasado una noche en la casa flotante una auténtica pasada y una noche en la habitación solárium bien también. La comida que prepara Alberto es una pasada y riquisimaaaa!!  El desayuno de los mejores que he comido ...Eso si no penséis q es un hotel de 5 estrellas, es un hotel rural con sus bichos sus perros y todo lo q conlleva estar en medio de un valle precioso y el último trayecto de unos 2km es un camino forestal pero despacio se llega bien. Todo muy limpio y la atención excelente. Lo recomiendo al 100%. Yo volveré seguro. Me ha enamorada el sitio. 

Fantástico 

El hotel, además de respetar el entorno, es maravilloso, al igual que los anfitriones- La comida, sana y excelente... deliciosa! Esa es la exacta descripción de los días que allí pasamos: DELICIOSOS!!! Y ver las estrellas desde "EL BARCO", tomando una copa de vino, es una de las mejores experiencias que hemos vivido.
Recomendable para días en pareja, en familia, con amigos o con compañeros de trabajo... cualquier excusa es buena para relajarse en el mar de la tranquilidad.

Un mar de tranquilidad en medio del monte

Es un sitio con encanto, acojedor y agradable. La atención del dueño atento y familiar, las comidas muy sabrosas realizadas con productos de su huerta. Ideal para desconectar y hacer senderismo. Volvemos!!! Y sin olvidarnos de Sebastián, Paquurrin y Paquita que nos ha acompañado en todo momento, tres perros que tiene aquí maravillosos y buenos 😍. 

Celebración 

Estuvimos en el barco y nos encanto. Es una casita llena de encanto y arte. Además tiene cocina con nevera por lo que puedes prepararte la comida sin problemas.La cama es muy cómoda y las vistas increíblemente bonitas. Pasamos un fin de semana de lo mas relajante.
Tienen tres perritos adorables y alberto,el dueño es muy majo. 
Como dato, decir que el último km hasta llegar a la casa es una pista forestal en la que hay que ir con mucho cuidado si no tienes un 4x4, mejor si llegad de día. Y yo no pediría comida porque aunque este rica es bastante cara. Un desayuno para 2 que constaba de medio tomate, medio aguacate,medio pepino, unos pimientos peques y dos trocitos de tortilla, con leche y café por 24€ me parece demasiado. Pero eso ya es a gusto de cada uno.


Una pasada de bonita

Vale la pena (aunque está lejos de todo), por la visita a la carrasca y la comida espectacular. Aparte hay como una zona de pic-nic con columpios y tal para pasar una jornada en familia muy correcta. Recomendable¡¡

Superbien

Estuvimos hace unos diás, mi pareja y yo y pasamos dos noches en EL BARCO. Nuestra intención era descansar y desconectar y lo hemos conseguido con crece, el lugar no puede ser mas mágico y no se puede estar mas a gusto. La casa es preciosa, su bañera y su cama son espectaculares. Los dos salimos con una sonrisa de alli y estamos deseando volver en otra estación para ver esos colores al atardecer. Gracias a Alberto por su trato y por todo.
Personalmente no entiendo a los que han hecho malas criticas de este lugar, nunca había sentido tanta paz en un lugar al que he ido para desconectar. 
Volveremos y no tardaremos.

Mar De La Carrasca

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