Avenue B&B

B&B que es lo que es: un lugar donde poder pasar alguna noche de manera cómoda y tranquila. Sin apenas gente (creo que había dos habitaciones), y muy bien ubicado, a escasos metros de la estación de tren, y en la calle principal donde poder comenzar la visita turística. Lo cierto es que más allá del B&B, lo mejor de esta opción es su gerente: Massimo fue todo amabilidad y disponibilidad. Unos días antes tuvimos que cambiar el horario de llegada, llegando relativamente pronto por la mañana, y no puso ningún problema. Al contrario. Nos atendió encantado, y después de deshacer las maletas estuvimos un buen rato charlando con él, haciéndonos una ruta turística que nos hizo dejar en la habitación los papeles que habíamos traído. Con su información era más que perfecto. Además, nos recomendó sitios para comer, y nos dio su teléfono personal por si hubiera algún problema ya no sólo en el B&B, sino a nivel personal. Eso, cuando llegas a una ciudad sin conocer nada ni nadie, es de agradecer. Se nota que le gusta lo que hace, y eso siempre es un aspecto muy positivo. Tanto en la habitación como en el baño había de todo (más de lo que hemos encontrado en otro B&B) y el desayuno es en una pastelería que hay justo enfrente, muy muy buena.