Hotel Brecherspitze

A principios de este mes mi hermano y yo nos alojamos 9 días en este hotel situado a 200 metros de la plaza de St-Martin en Munich. La habitación doble que tuvimos constaba de dos camas individuales con sus mesillas e iluminación individual, un gran armario con cajones, perchas, baldas y espacio suficiente para las dos grandes maletas que llevábamos. Había otro mueble grande (una mesa con una televisión plana) y una silla. Los colchones de las camas eran confortables. Nuestra habitación era exterior. A pesar de nuestros temores, calle adyacente no tenía mucho tráfico y no era ruidosa.. Los baños+duchas son comunes (tres por planta), pero son más que suficientes para el limitado número de habitaciones por planta. El desayuno tipo buffet era bueno, sin ser excelente: - Zumo de naranja industrial. - Varios panes de tipo bollo individual (integral, de semillas, normal) y panes de tipo molde. - Mermeladas y yogures (me encantaron el natural y el de arándanos). - Embutidos: jamón, salchichón, mortadela. - Tomate, huevo cocido entero o troceado. - Dos tipos de pastelitos. - Un café excelente de una cafetera con varios programas automáticos. Fue un sorpresón agradable e inesperado. - Té. El hotel está bastante bien situado: - El primer día nos aprendimos como ir andando a Marienplatz (3 km, unos 35-40 minutos). - El tranvía 17 está en la plaza de San Martín, a unos 200 metros del hotel. Los títulos de transporte diarios o de periodos de tres días funcionan muy bien en la ciudad. - Los días que alquilamos coche aparcamos con facilidad muy cerca del hotel. Atención, aparcando entre las 20:00 de la tarde y las 9:00 del día siguiente hay que pagar unos 2 euros. Nos dijeron que aparcar todo el día en la zona cuesta unos 6 euros. - Hay bares y restaurantes al lado del hotel. El personal del hotel es atento y amable. Volvería a este hotel sin dudar.